Corresponsal en Washington
Actualizado:
Guardar
Acostumbrado a todo tipo de advertencias al régimen iraní, el presidente Donald Trump guarda estos días un riguroso silencio sobre la muerte del científico que gestionaba el programa nuclear de los ayatolás, una señal de que apoya a Israel en lo que sea necesario, y no va a pedir a nadie que rinda cuentas. Ese silencio es normal por esperado, pero será imposible de mantener por el demócrata Joe Biden cuando tome el testigo de la presidencia el 20 de enero.
Al presidente electo no le queda duda de que si Irán se contiene de momento en su respuesta es porque sabe que él va a tomar las riendas del país y hasta entonces Trump va a intentar hacer